La planificación para la jubilación es un aspecto fundamental en la vida laboral de cualquier persona. Entre los diversos requisitos y normativas que rigen el acceso a las pensiones en España, la “doctrina del paréntesis” se presenta como una herramienta clave para aquellos que se enfrentan a desafíos en sus cotizaciones. Esta doctrina puede ofrecer soluciones valiosas a trabajadores que, por diversas circunstancias, no cumplen con las exigencias habituales de cotización. En este artículo, profundizaremos en cómo esta doctrina funciona y los requisitos necesarios para acceder al subsidio de mayores de 52 años.
Requisitos de cotización para la jubilación y subsidio de mayores de 52 años
Uno de los requisitos fundamentales para acceder a la jubilación en España es haber cotizado un mínimo de 15 años a lo largo de la vida laboral, de los cuales al menos dos deben encontrarse dentro de los últimos 15 años. Este requisito puede ser un obstáculo para muchos, especialmente para aquellos que han estado desempleados durante períodos prolongados.
Para solicitar el subsidio de mayores de 52 años, es imprescindible cumplir con ciertos criterios, además de los requisitos de cotización mencionados anteriormente. Estos son algunos de los requisitos necesarios:
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- Haber cotizado al menos 15 años en total, incluyendo diferentes regímenes como el general, autónomos, entre otros.
- Contar con al menos dos años de cotización dentro de los últimos 15 años, variable debido a la aplicación de la doctrina del paréntesis.
- Demostrar que se cumplen todos los requisitos, excepto la edad, para acceder a cualquier tipo de pensión contributiva de jubilación.
La doctrina del paréntesis permite cierta flexibilidad en el cumplimiento de la carencia específica de cotizaciones, lo que es especialmente relevante para desempleados mayores de 52 años que han enfrentado dificultades laborales.
¿Qué es la doctrina del paréntesis en las cotizaciones?
La doctrina del paréntesis es una interpretación jurídica que permite considerar como «tiempo muerto» aquellos períodos en los que un trabajador no ha podido cotizar debido a circunstancias ajenas a su voluntad, como el desempleo prolongado o situaciones de incapacidad. Esto significa que, al calcular los períodos de cotización necesarios para la jubilación, se pueden ignorar estos tiempos sin cotización.
Este concepto se basa en una serie de sentencias del Tribunal Supremo que han establecido que se debe tener en cuenta la realidad del mercado laboral y las dificultades que enfrentan los trabajadores. En esencia, se pone «en pausa» el conteo de los años de cotización durante los períodos en que el trabajador estaba desempleado, permitiendo así que se extienda el cálculo hacia atrás, cubriendo el tiempo que no se pudo cotizar.
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Ejemplo práctico: El caso de Soledad
Para ilustrar la aplicación de esta doctrina, consideremos el caso de Soledad. Ella ha cotizado un total de 16 años, pero no tiene los dos años de cotización requeridos en los últimos 15 debido a un período prolongado de desempleo. Sin embargo, gracias a la doctrina del paréntesis, su situación puede ser reevaluada.
Soledad estuvo en paro involuntario durante nueve años y, al aplicar la teoría del paréntesis, esos años se consideran “fuera de conteo” para los requisitos de cotización. Esto significa que su registro de cotización se puede extender hacia atrás, permitiéndole potencialmente cumplir con los requisitos para solicitar el subsidio.
Aplicación de la doctrina del paréntesis: ¿Cuándo puede ser utilizada?
La aplicación de la doctrina del paréntesis no es automática y requiere un análisis caso por caso. Algunas de las situaciones en las que puede ser aplicada incluyen:
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- Períodos prolongados de desempleo involuntario, siempre y cuando el trabajador haya permanecido inscrito como demandante de empleo.
- Situaciones de enfermedad grave o incapacidad temporal que hayan impedido al trabajador cotizar.
- Internamientos en prisión, siempre que durante ese tiempo el trabajador haya mostrado disposición para el trabajo.
Sin embargo, existen limitaciones. Por ejemplo, si un trabajador estuvo en situación de incapacidad permanente total, no se le aplicará la doctrina del paréntesis, ya que puede haber tenido la oportunidad de trabajar en otras actividades.
Jurisprudencia sobre la doctrina del paréntesis
La jurisprudencia del Tribunal Supremo ha establecido criterios claros sobre la aplicación de la doctrina del paréntesis, reafirmando que no puede haber una reducción de los períodos de cotización exigidos por ley. Las sentencias delinean que:
- Los períodos de carencia son estrictos y no pueden ser modificados arbitrariamente.
- Las situaciones asimiladas al alta no son exhaustivas, permitiendo una interpretación más amplia.
- Se pueden excluir del cómputo de cotizaciones los períodos en los que el trabajador no pudo cotizar por razones ajenas a su voluntad.
Reconocimiento de la doctrina del paréntesis por el SEPE
A pesar de la jurisprudencia existente, el reconocimiento de la doctrina del paréntesis por parte del SEPE (Servicio Público de Empleo Estatal) no es automático. Hasta ahora, muchas reclamaciones que han invocado esta doctrina han sido desestimadas en la vía administrativa.
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Esto se debe a que el SEPE tiende a adoptar enfoques más restrictivos al evaluar las solicitudes de subsidio. Por lo general, se basa en informes del INSS (Instituto Nacional de la Seguridad Social) sobre las cotizaciones del solicitante. Por ello, es probable que el derecho a solicitar el subsidio utilizando la doctrina del paréntesis deba ser defendido en los tribunales.
Para ello, es esencial presentar una reclamación previa administrativa adecuada, preparándose para la posibilidad de un proceso judicial si la reclamación no es atendida favorablemente.
Normativa sobre el acceso a las prestaciones de jubilación
La normativa que regula el acceso a las pensiones de jubilación se encuentra en el Artículo 205 de la Ley General de la Seguridad Social. Este artículo establece que:
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- Los solicitantes deben haber alcanzado los 67 años de edad, o los 65 años si han cotizado al menos 38 años y seis meses.
- Es necesario haber cotizado un mínimo de 15 años, de los cuales al menos dos deben estar dentro de los últimos 15 años.
Además, se especifica que, en ciertos casos, se puede acceder a la pensión de jubilación incluso si el solicitante no está en alta en el momento del hecho causante, siempre que se cumplan los requisitos de edad y cotización.
Conclusión: Comprendiendo tus derechos y opciones
La comprensión de la doctrina del paréntesis y los requisitos de cotización para la jubilación es fundamental para cualquier trabajador, especialmente aquellos mayores de 52 años enfrentando el desempleo. Si te encuentras en una situación similar o tienes dudas sobre cómo proceder, te invitamos a consultar nuestro servicio de Papeles Claros, donde podrás enviar documentos y recibir asesoría sobre tus derechos y opciones.