El despido improcedente es una situación que puede afectar a cualquier trabajador, y entender sus implicaciones es crucial para proteger sus derechos laborales. En este artículo, abordaremos en profundidad qué significa un despido improcedente, las razones por las que puede ocurrir y cómo actuar si te encuentras en esta situación. Conocer tus derechos te permitirá tomar decisiones informadas y defenderte de posibles abusos. ¡Sigue leyendo para conocer todo lo que necesitas saber!
Claves del despido improcedente
El despido se considera improcedente cuando la empresa no puede justificar adecuadamente la causa alegada o no cumple con los requisitos legales establecidos para llevar a cabo la terminación del contrato laboral. Esto significa que no hay una justificación válida que respalde la decisión del empleador.
¿Cuánto se cobra por despido improcedente? La indemnización por despido improcedente es de 33 días de salario por cada año trabajado, con un máximo de 24 mensualidades. Sin embargo, para contratos anteriores a 2012, la indemnización puede calcularse con 45 días por año trabajado.
¿Qué derechos tengo? Al ser despedido de forma improcedente, tienes derecho a optar por una indemnización económica o la readmisión en tu puesto de trabajo, a elección del empresario, salvo si eres representante sindical, en cuyo caso la readmisión es obligatoria.
¿Cuáles son las causas de un despido improcedente? Existen varios motivos que pueden calificar un despido como improcedente, tales como la falta de causa real, la ausencia de pruebas, la comunicación fuera de los plazos legales establecidos o si el procedimiento seguido no es el adecuado.
¿Qué es un despido improcedente?
Un despido improcedente se refiere a la finalización de un contrato laboral de manera unilateral por parte del empresario, sin que se cumplan los requisitos legales o sin que exista una causa justificada. Según el Estatuto de los Trabajadores, cualquier despido disciplinario debe realizarse por escrito y contener las razones de la terminación y la fecha de efectividad.
La falta de requisitos materiales se refiere a situaciones como el incumplimiento grave de las obligaciones del empresario, por ejemplo, modificaciones sustanciales en las condiciones de trabajo sin seguir el procedimiento legal correspondiente. Si un despido se considera improcedente, el trabajador tiene derecho a reclamar.
Causas del despido improcedente
Las causas de despido improcedente pueden clasificarse en dos categorías: la falta de justificación y el incumplimiento de requisitos formales.
Falta de justificación: Un despido es improcedente cuando el empresario no cumple con los motivos legales para proceder a la terminación del contrato. En este sentido, la carga de la prueba recae sobre el empleador, quien debe demostrar que los motivos alegados son reales. Según el Estatuto de los Trabajadores, un despido objetivo solo será considerado procedente si se basa en:
- Ineptitud del trabajador.
- Falta de adaptación a modificaciones laborales.
- Motivos económicos, técnicos o de producción.
- Absentismo continuado del trabajador.
Falta de cumplimiento de requisitos formales: Para que un despido sea válido, deben seguirse ciertos procedimientos legales, que incluyen:
- Notificación del despido por escrito.
- Indicación de las causas del despido.
- Especificación de la fecha de efectividad del despido.
¿En qué circunstancias podemos encontrarnos ante un despido improcedente?
Es fundamental conocer las circunstancias que pueden rodear un despido para determinar su legalidad. Examinemos algunos escenarios comunes:
Despido improcedente durante una baja laboral
El despido durante una baja médica puede ser un tema delicado. Un despido durante este período es considerado improcedente si se basa únicamente en la baja. La empresa debe demostrar que existen razones válidas para el despido, y si no puede, el despido será considerado improcedente.
Despido improcedente sin preaviso
El despido sin preaviso implica que el empleador finaliza el contrato sin comunicarlo con la antelación mínima requerida. En estos casos, el trabajador tiene derecho a una serie de compensaciones, que pueden incluir:
- Liquidación por vacaciones no disfrutadas y otros conceptos pendientes.
- Indemnización de 33 días por año trabajado.
- Indemnización adicional por no cumplir con el preaviso.
- Derecho a impugnar el despido judicialmente.
- Acceso a la prestación por desempleo.
Despido durante el período de prueba
Durante el período de prueba, tanto el empresario como el trabajador pueden dar por finalizada la relación laboral sin necesidad de justificar su decisión. Sin embargo, si el despido se realiza por motivos discriminatorios, como el embarazo de la trabajadora, puede ser calificado como improcedente.
Despido con contrato temporal
A pesar de que un contrato sea temporal, el empresario debe seguir cumpliendo con los requisitos formales y materiales. Si no lo hace, el despido puede ser declarado improcedente si el trabajador presenta la reclamación correspondiente.
Cómo actuar ante un despido improcedente
Si te enfrentas a un despido improcedente, es esencial seguir ciertos pasos para proteger tus derechos. Primero, debes interponer una reclamación solicitando la calificación del despido como improcedente dentro de los 20 días hábiles desde la notificación del despido.
Es recomendable contar con el asesoramiento de un abogado especializado en derecho laboral, que te guiará en el proceso. En algunos casos, la empresa puede reconocer la improcedencia del despido en la carta, lo que facilitaría la indemnización correspondiente.
Papeleta de conciliación
Este es el primer paso para impugnar un despido. Consiste en presentar una papeleta de conciliación ante el SMAC, donde se busca llegar a un acuerdo entre las partes. Este paso es necesario antes de presentar una demanda judicial.
Demanda por despido improcedente
Si no se alcanza un acuerdo en la conciliación, puedes presentar una demanda ante el juzgado. El plazo para esto es también de 20 días, y el proceso puede incluir la presentación de pruebas y alegaciones en un juicio. Es altamente recomendable contar con un abogado durante este proceso.
Consecuencias del despido improcedente
Si el juez declara un despido como improcedente, el empresario tiene dos opciones: readmitir al trabajador o indemnizarlo. En caso de readmisión, el trabajador debe ser reincorporado en las mismas condiciones y puesto que tenía antes del despido, además de recibir los salarios adeudados durante el proceso de reclamación.
Si el empresario opta por la indemnización, deberá abonar la cantidad correspondiente, que varía según la fecha de inicio del contrato. Para los contratos firmados antes del 12 de febrero de 2012, la indemnización es de 45 días por año trabajado, y para los posteriores, de 33 días por año, con un límite de 24 mensualidades.
¿Hay derecho al paro tras un despido improcedente?
Los trabajadores despedidos de forma improcedente tienen derecho a acceder a la prestación por desempleo, siempre y cuando cumplan con los requisitos establecidos. Esto incluye haber cotizado al menos 360 días en los últimos seis años y encontrarse en situación legal de desempleo.
Es importante inscribirse en el SEPE como demandante de empleo para poder acceder a la prestación. Este derecho se mantiene incluso durante el proceso de conciliación y espera del juicio.